POEMA
POEMA DE TEODORO RUBIO
Concluye, al fin, el hombre
su jornada.
Para calmar la sed de su fatiga
exprime, luego,
el jugo de la espiga
y la vierte en la copa acristalada.
Néctar hecho con lúpulo
y cebada,
malta, agua y levaduras.
Dios bendiga
el amargo sabor como la ortiga
de esta fresca bebida fermentada.
Labriegos, faraones y sultanes,
egipcios y sumerios,
alemanes y españoles,
bebieron la cerveza